jueves, 8 de septiembre de 2011

Un Allah de Justicia

“¡Oh, creyentes!  Sed firmes con [los preceptos de] Dios, dad testimonio con equidad, y que el rencor no os conduzca a obrar injustamente. Sed justos, porque de esta forma estaréis más cerca de ser piadosos. Y temed a Dios; Dios está bien informado de lo que hacéis.” (Corán 5:8)

La justicia es un don que Allah subhana wa ta'ala da a todas nosotras, pero es un don que se crea y se mantiene con la fe, con nuestras acciones, con nuestros pensamientos, con todo lo que en se merece ser justo.

Hay muchas lecciones que podemos aprender diariamente, en el Islam la justicia es igualdad, ademas que el Corán plasma la base de mantenerla, es una de las confianzas mas importantes para el individuo creyente, haciendo que el creyente también extienda la justicia como un virtud personal y no como un modo de remediar algo cuando ya se ha hecho algún mal, pues la justicia no esta con los injustos.

La vida nos coloca grandes metas y entre esos objetivos en  cada momento se encuentra la justicia. La mujer como creyente musulmana debe ver exactamente donde colocar esta virtud, su esencia es clara para el hombre y sus dotes son necesarios para crecer tan como persona como creyente buscando la complacencia siempre de Allah para siempre obtener el paraíso.

Todos absolutamente somos ante Allah iguales por eso es que Allah siempre nos atiende, esta allí para auxiliarnos, para apoyarnos, para buscarlo mediante la adoración. La adoración es un obligación con Allah, no podemos tener un corazón injusto y así adorarlo, no, no se puede hacer eso, hay que limpiarnos, hay que liberarnos de lo que es Haram permitir lo Halal, si bien la injusticia es sumamente grande y grave entre los hombres, pero podemos ver como si colocamos un grano de arena, hacemos de la justicia algo esencial para nuestra calidad de vida.

Una de las lecciones que recuerdo es que Durante la vida del Profeta Muhammad (La Paz y las bendiciones sean con él) ocurrió que una mujer de Majzúm robó y por ello fue condenada. Los Quraishíes (de la tribu de Quraish) se encontraban bastante preocupados por la cuestión y se preguntaban: ¿Quién podrá interceder por ella ante el Enviado de Allah (la paz y las bendiciones de Allah sean con él)? Alguien dijo: "Nadie salvo Usama bin Zaid, pues es el más querido por el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Dios sean con él).  

Usama intercedió por aquella mujer ante el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah sean con él), quien dijo: "Acaso pretendes interceder ante una sentencia prescrita por Allah?".
Acto seguido se levantó y exhortó a la gente: "Ciertamente, lo que llevó a los pueblos anteriores a vosotros a la perdición y la destrucción fue que dejaban libre al noble cuando robaba. Juro por Allah que si Fátima, la propia hija de Muhammad, habría robado le habría cortado la mano".  

Asi que siempre Allah nos da una portunidad, porque somos piadosas, y aunque somos probadas siempre recibiremos justicia, la fe en la justicia es real.

Allah sabe que es lo justo en lo justo y lo injusto en lo injusto, asi que no te aflijas por la injusticia humana. El pecado trae como consecuencia la falta de igualdad entre las naciones, el hambre y la enfermedad. Mientras seamos consciente de que somos unos verdaderos sometidos de Allah la virtud de la justicia se hara presente. Mientras vivas en el mundo, tendrás que lidiar con todo esto, pero mira hacia adelante, alli estará el Allah de Justicia.

Si te aflige la injusticia, confía en Allah siempre.

La guerrera del Islam

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